jueves, 11 de diciembre de 2008

No pierda los DATOS

¿Cuántas veces ha perdido de su computadora archivos fotográficos, tesis de grado, o sus

mejores trabajos? Algunas estadísticas advierten que una de cada tres personas han "extraviado" la información almacenada, y un muy bajo porcentaje de ellas logra recuperarla. Ente las razones por las cuales puede padecerse este problema, destacan el ataque de virus y salvar en carpetas desconocidas o que muchas veces son irrecuperables.

Aunque ante el descuido por no poseer un antivirus actualizado existen pocas posibilidades, la opción más segura para evitar estos percance es el respaldo. Para esto no hace falta utilizar un pendrive o trasladar una copia de archivos a la computadora de un tercero, puesto que existen soluciones que proveen mucho más espacio que el otorgado por las unidades de almacenamiento masivo: los discos duros portátiles.
Estos dispositivos se han convertido en la solución para quienes desean amparar sus archivos fuera de su computadora de escritorio o incluso fuera de las portátiles. Existen desde 20GB en adelante, y su capacidad dependerá directamente de sus necesidades.

Estas unidades son generalmente pequeñas, y algunas incluso caben en la palma de la mano, aunque alcanzan potencias de 500GB. En la mayoría de los casos funcionan como un pendrive, se conectan vía USB y sincronizan las carpetas que se identifiquen.
Los hay de dos tamaños: 2.5 y 3.5 pulgadas; mientras más pequeño, es mayor el costo por gigabyte, aunque dependiendo del uso que desee otorgarle tendrá sentido uno u otro.

Por ejemplo, si usted desea trasladarlo a todas partes para tener los datos de su ordenador al alcance de su mano, es preferible que adquiera el más pequeño; pero si, por el contrario, su objetivo es sólo utilizarlo como respaldo o depósito de archivos, fotos y videos, entonces el de mayor tamaño cumplirá satisfactoriamente su función.

Existen muchas marcas, así que al adquirir alguno es importante fijarse en las "revoluciones por minuto" (RPM), o en su capacidad de procesamiento, puesto que este dato indicará la rapidez con la cual trabajará el disco, que suele ir de 4.200 a 5.400 RPM.
Si decide resguardar sus datos, fíjese con qué versión de Windows trabaja y si acepta Mac. Recuerde desinfectar su computadora antes de enviar los archivos a su nueva unidad.


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