martes, 11 de noviembre de 2008

Celebrando la vida

A proposito de cumplir años... pensaba en que mi percepción acerca de su significado ha ido cambiado, siempre ha conservado un valor para mí, muy especial: ¡es motivo de alegría y celebración personal! Me parece que todo se limpia a mi alrededor y comienza de nuevo. Es como el cierre de un ciclo, que me permite revisar y reflexionar acerca de lo que ha sido mi vida en el último año, preguntarme si quiero seguir viviendo de la misma manera o deseo hacer algunos cambios. Al mismo tiempo simboliza el comienzo de otro ciclo, completamente nuevo, que me permite plantearme la vida de una manera diferente, trabajar en mí, para ser más libre de experimentar el bienestar y la plenitud de la vida. Así que dejando atrás cualquier mal sentimiento o recuerdo, ¡me dispongo a celebrar una vez más, el aniversario de mi nacimiento!
Generalmente hay dos grupos de personas, las que gustan de celebrar las ocasiones especiales y las que no celebran a menos que estén obligados a hacerlo. Celebrar significa reconocer el valor que tienen ciertos eventos para nosotros, está asociado a sentimientos de alegría, bienestar, felicidad, esperanza, compartida... en fin, sentimientos que nos llevan a conectar con lo mejor de cada uno de nosotros. En la medida en que nuestras vidas se ven afectadas por las presiones del día a día... perdemos el sentido espontáneo de reconocer el valor que tienen las cosas buenas, bellas, pequeñas e importantes de la vida. No sólo se trata de celebrar los regalos o los milagros, también se trata de celebrar el esfuerzo, el ¡trabajo que hemos realizado para alcanzar algo!
¿Qué es lo primero que viene a tu mente cuando piensas en celebrar? En mucha gente reunida y riendo, en música bailable, o en una gran comida, en globos, en una fiesta... ¿Hace cuánto tiempo que no celebras algo?
¡Es tiempo de celebrar la vida! De reconocer todos los pequeños regalos que recibimos cada día, es tiempo de reconocer todo el esfuerzo que hemos realizado solos o en grupo, de valorar la presencia positiva de otras personas en nuestra vida, de rememorar las fechas de aquellos acontecimientos importantes y positivos que marcaron nuestras vidas, un aniversario.

Existen muchas maneras de celebrar.
Hoy voy a compartir siete contigo:
1- Comparte con tus amigos. Elige un grupo de amigos muy especiales y cuéntales el motivo de la celebración. Invítalos a compartir y a participar contigo en la preparación de la fiesta. Recuerda que en la medida en que te sientas a gusto y en confianza con ellos disfrutarás más de la celebración.

2- Busca un momento de interiorización. Es importante hacer un inventario de todo lo que has hecho durante este tiempo; pregúntate, si te gustaría cambiar algo. Este, es el mejor momento para elaborar nuevas metas que te lleven a conseguir aquello que sueñas.

3- Crea una reunión familiar. Puede ser una ocasión perfecta para el reencuentro con la familia. Haz una lista con los nombres y teléfonos de aquellos familiares que te gustaría volver a ver e invítalos a compartir una velada contigo. Mantén siempre el ánimo de la reunión en el recuerdo y la celebración de los buenos momentos.

4- Llénate de alegría. Es muy importante que experimentes alegría por dentro; éste es el combustible para despertar la creatividad y el espíritu de celebración. Renueva tus pensamientos y conéctate al recuerdo de todo lo bueno y positivo que ha significado para ti.

5- Unete a la celebración. Algunas veces son otros lo que celebran un acontecimiento especial, entonces únete a ellos con el mismo espíritu de alegría, expresa tus felicitaciones desde el corazón. Desearle lo mejor a otros desinteresadamente, hará que la abundancia y la prosperidad lleguen a nuestra vida. ¡Aprende a alegrarte por lo que otros reciben o merecen en sus vidas!

6- Expresa tus deseos. Si el motivo de la celebración es personal, date gusto y complace alguno de tus deseos. Recuerda que tú eres la persona más importante para ti, encuentra la mejor manera de celebrarlo y no lo dejes pasar.

7- Dale rienda suelta a la creatividad. Podemos, con pocos recursos, hacer una celebración muy especial lo más importante es tener el deseo de hacerlo. Usa tu creatividad. Celebrar algún acontecimiento especial en nuestra vida, significa no perder de vista el significado profundo que tiene para nosotros, implica mantener vivo el recuerdo de todo lo positivo que ha traído a nuestra vida y representa la oportunidad de compartir con otros la alegría y los buenos sentimientos que despierta en nosotros. El motivo de toda celebración es festejar en lo temporal algo que ya existía en nuestros corazones.

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