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1 Darse los buenos días
Los primeros minutos que transcurren al despertar marcan, en buena medida, la pauta del día. La autora recomienda no salirse inmediatamente de la cama al abrir los ojos. Sugiere dedicar cinco minutos a tomar conciencia del cuerpo: "Estírese, flexionando los brazos y extendiendo los pies hacia el extremo de la cama. Lleve las rodillas hacia el pecho y deje que caigan suavemente hacia un costado del cuerpo. Gire lentamente la cabeza y oriente los brazos en dirección opuesta. Luego póngase lentamente de pie. Salude al día con una sonrisa y un estiramiento, por muy duro que vaya a ser".
2 Un desayuno energético
No debe omitirse la primera comida del día por ocupaciones ni mucho menos por dietas. Jane Alexander destaca que al tomar un buen desayuno se está dando al cuerpo y a la mente el combustible que necesitan en la mañana. Propone un buen equilibrio de proteínas, grasas y carbohidratos. Entre sus sugerencias destaca un batido rebosante de vitaminas y minerales para potenciar la salud. Se llama Delicia tropical.
Ingredientes
l Un cambur
l Medio mango
l Un pedazo de lechoza
l Medio litro de jugo de naranja
Preparacion
Mezcle en la licuadora con hielo hasta que el batido esté uniforme y cremoso. Sírvalo fresco directamente de la licuadora.
3 Buscando la calma y el centro
La meditación aquieta la mente, combate la tensión y prepara mentalmente a las personas para el día que tienen por delante. "Procure realizar una breve meditación de cinco minutos antes de salir al trabajo", dice la autora al tiempo de esbozar el siguiente ejercicio:
l Siéntese en cualquier posición que le resulte cómoda y cierre los ojos, manteniendo la cabeza bien erguida y los hombros relajados.
l Comience a respirar a un ritmo constante y profundo. No trate de influir demasiado en la respiración, simplemente préstele atención durante unos minutos.
4 De camino al trabajo
Desplazarse hacia el trabajo, especialmente cuando se vive en Caracas, suele ser una fuente de tensiones: tráfico congestionado y conductores impacientes, son suficientes para el estrés. "Convierta su automóvil en un espacio cómodo y reconfortante. Dedique cinco minutos del día para sacar lo que ya no necesite: periódicos viejos, juguetes de los niños u otros objetos que puedan estar de más", escribe Alexander. Otra recomendación: Elija cuidadosamente la música de acuerdo con su estado de ánimo y disposición, pero eso sí, ni demasiado agresiva ni demasiado somnífera.
Al conducir ajuste la posición de su asiento para no tener que esforzarse por llegar a los pedales, aunque tampoco debe estar encima del volante. Cuando se está frente a él hay que cuidar también la columna. Se recomienda mantener erguido el asiento y sentarse hasta el fondo, haciendo contacto con la totalidad de la espalda.
5 Sonidos para el relax
Escenario: En una cola de carros y con una cita pendiente a la que quiere llegar puntual. Empieza el nerviosismo.
Propuesta:
Hacer sonidos para disolver tensiones. "Si aparecen las ansías, empiece con un murmullo; el mismo resonará por todo el cuerpo y le calmará. Otra opción es el suspiro; uno largo y retumbante ayuda a liberar las molestias. Escuche música animada e intente cantar. Evite temas musicales suaves, pues éstos pueden aumentar la irritación", explica Alexander.
6 Paseando hacia el bienestar
Al desplazarse a pie se recomienda hacerlo conscientemente, vinculándolo con el disfrute. "Tome conciencia de cómo camina y trate de andar un poco más despacio de lo que lo hace normalmente; centre su atención en la respiración; esto último intente hacerlo una o dos veces durante el día".
7 El espacio en el trabajo
"Escritorio limpio, mente clara", puntualiza la autora. Entre asignación y asignación tómese un breve descanso cada hora: un paseo de unos minutos, realizar algún estiramiento le ayudan a refrescarse y recuperar la concentración.
8 Gimnasia de manos y pies
En la oficina o en cualquier lugar que lo permita, gire los pies y las manos en el sentido de las agujas del reloj y viceversa.
9 El regreso a casa
"Al llegar a casa invítese a cortar vínculos con el trabajo. Si descubre que permanece mentalmente en la oficina, necesita desconectarse haciendo algo que le ayude a marcar la separación. Al entrar por la puerta, se debe tomar conciencia de que se está pasando del mundo externo al mundo interno". Colgar el abrigo, soltar el maletín, quitarse los zapatos, caminar un rato descalzo por la casa y vestirse cómodamente, son prácticas que ayudan a crear una atmósfera más relajada. Jane Alexander da una recomendación para quien haya tenido un mal día:
"Acuéstese de espaldas, póngase cómodo y cierre los ojos. Preste atención a su respiración y siga su ritmo, percibiendo como fluye hacia dentro y hacia fuera. Ponga las manos sobre el cuerpo en el lugar donde note tensión. Luego dirija la atención hacia ese lugar. Siga respirando y luego continúe practicando en otros lugares del cuerpo".
Regálese el lujo de un largo baño y aproveche las bondades de la hidroterapia.
"Cepillarse la piel es una de las técnicas más simples y eficaces para recargar el cuerpo y mejorar la salud, pues estimula el sistema linfático -parte esencial del sistema inmunológico- y ayuda a expulsar las toxinas". Alexander recomienda usar un cepillo de cerdas naturales
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