El Noviazgo es una de las más bellas etapas en la relación de pareja, porque es la época durante la cual mostramos nuestra mejor cara, hacemos todo lo que sea necesario para agradar al otro y hacerlo sentir muy especial. Durante este tiempo, tenemos detalles, toleramos y comprendemos a la otra persona, estamos dispuestos a perdonar y a pasar por alto ciertas diferencias sin dejar que nos afecten, nos sentimos motivados y entusiasmados para compartir con la pareja, soñamos juntos y hasta proyectamos lo que será nuestra vida en común. Viéndolo de esta manera, ¿no crees tú que deberíamos ser novios por el resto de la vida? El noviazgo no debería ser sólo una etapa corta y maravillosa que desaparece una vez asumido el compromiso de vivir juntos, para darle paso a otra etapa complicada y desconocida, la convivencia, en donde uno de los dos o los dos al mismo tiempo van cambiando su actitud y comportamiento para convertirse en los perfectos extraños.
La mayoría de las veces el día a día, las responsabilidades y la rutina hacen aflorar una serie de características de la personalidad totalmente desconocida; el estrés y la tensión hacen que ya no cuidemos los detalles, la comunicación, el trato y los gestos que teníamos. Algunas personas se preguntan en ese punto:
¿Es que se acabó el amor?
Qué sensaciones tan especiales tenemos cuando estamos enamorados y somos correspondidos. Tu corazón late aceleradamente cuando te encuentras con ella, te sonrojas, sientes las famosas mariposas en tu estómago… y quiero decirte que en la medida en que cumples años, las sigues sintiendo aunque más calmadas. El deseo de acompañarte con él o con ella, de compartirlo todo y descubrir sus gustos e intereses… ¿Te acuerdas? ¡Puede continuar siendo así! Rescata el amor de todas las presiones y tensiones a la que está sometido en este momento, recuerda cuáles fueron las cosas que te hicieron enamorar, los momentos especiales que compartieron y apóyate en ellos para renovar los votos de amor y comenzar de nuevo una época de noviazgo y enamoramiento. Hemos tenido el regalo de conocer parejas de amigos con muchos años de casados y novios eternos, verlos te recuerda que bien vale la pena hacer crecer el amor entre los dos, fortaleciendo el respeto, la comunicación, el cariño, los detalles, la intimidad y los buenos momentos.
Si en este momento estás solo, tienes la oportunidad de convertirte en la persona ideal que atraiga a su vida a esa pareja con la que deseas compartir el resto de la vida. Prepárate y pregúntate si estás dispuesto a compartir tu espacio vital, a aceptar sus diferencias, a conocer y aprender sus gustos e intereses, si estás más dispuesto a dar que a recibir.
Estás listo para que querer y que te quieran sin permitir que las heridas del pasado se interpongan en tu felicidad.
1. Cultivar lo mejor de cada uno para que tengan un mayor crecimiento y desarrollo personal. Recordemos que la relación de pareja en una especie de pote en común donde cada uno coloca lo mejor de sí mismo para sumar al bienestar de los dos.
2. Ser auténticos. Mostrarnos tal cual somos, con nuestras cualidades y limitaciones, hará que podamos conocernos y aceptarnos sin esperar que el otro sea una persona diferente.
3. Fortalecer la empatía entre los dos. Colocarnos en el lugar de la otra persona, para ver las cosas desde su perspectiva hará que sea más sencillo el estar dispuestos a comprender y aceptar sus diferentes puntos de vista.
4. Valorar sus cualidades. En muchos casos sólo llaman nuestra atención los defectos o las características negativas de la otra persona, es muy importante que podamos reconocer sus cualidades y resaltarlas al momento de compartir.
5. Mantener el respeto del uno hacia el otro. Ahí donde terminan tus derechos comienzan los de tu pareja. Cuida tus palabras, gestos y comentarios en todo momento.
6. Afinidad de objetivos e intereses. La pareja ideal no es la que se mira tiernamente el uno al otro, son los que miran y caminan juntos en una misma dirección.
7. Sean cariñosos. Es imprescindible expresarlo todos los días, no permitas que las responsabilidades del día a día te hagan olvidarlo. Las palabras amables, los detalles y las caricias son un medio para expresarlo.
8. Reconozcan los logros, el esfuerzo y las cualidades de la pareja. Más importante que fijarte en sus defectos o debilidades lo es el resaltar todas sus cualidades, esto te ayudará a reconocerla y a valorar su presencia en tu vida.
¡Trabajen cada día para hacer más feliz a su pareja!
No hay comentarios:
Publicar un comentario