"Sentir pasión por lo que hacemos supone emprender un camino que nos conducirá a la realización como personas; por eso debemos procurar que ese algo especial que vamos a hacer sea afín con nuestra forma
de ser""
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Nos gusta vivir llenos de sueños y expectativas, pero la mayoría de las veces dejamos que el tiempo pase sin hacer algo concreto para cumplirlos. Pensamos que nos hacen falta muchas cosas para tener la vida que queremos, nos justificamos diciendo: "Cuando tenga un mejor trabajo", "cuando me asciendan", "cuando termine de pagar la casa", "cuando tenga mi negocio propio… y así pasan los días sin que podamos tener una vida plena. No podemos postergar la posibilidad de disfrutar la existencia y ser felices.
Es preciso renovar nuestra vida, llenarla de emociones y de proyectos nuevos. Hace falta que recuperemos la capacidad de soñar en grande, sin límites y sin anteponer los posibles obstáculos que tal vez enfrentaremos al trabajo que necesitamos hacer para conseguirlo. No podemos enfrentar una batalla sintiéndonos vencidos e incapaces antes de haberlo intentado siquiera.
Sentir pasión por lo que hacemos supone emprender un camino que nos conducirá a la realización como personas; por eso debemos procurar que ese algo especial que vamos a hacer sea afín con nuestra forma de ser, con nuestras aptitudes y con nuestros intereses personales.
La clave para que el trabajo se convierta en una actividad satisfactoria consiste, simplemente, en sentirnos a gusto con lo que hacemos, con los resultados que obtenemos, con nuestros compañeros y con el ambiente de trabajo, para poder poner toda nuestra energía, pasión y creatividad en cada cosa que hacemos.
El trabajo bien hecho, con mística, cariño, responsabilidad y compromiso, pone de manifiesto lo mejor de cada persona, pues el entusiasmo y la entrega que ponemos da como resultado la excelencia, y ésta nos da la posibilidad de triunfar en todos los demás aspectos de nuestra vida. Las personas exitosas y plenas consideran el trabajo como una fuente de realización.
Nuestra capacidad de vivir la vida a plenitud es innata, y es natural que tratemos de alcanzarla. Todo, absolutamente todo, puede convertirse en una actividad gratificante cuando se realiza con entusiasmo, pasión y el deseo de ser felices.
Para vivir con PASIÓN
Mantén una actitud positiva. Encuentra los aspectos positivos de tu trabajo, reflexiona acerca de su utilidad para los otros y sobre tu aporte al mundo. Piensa en cómo puedes mejorar tu desempeño para llegar a la excelencia y así entregar lo mejor de ti.
Trabaja con alegría. Una actitud entusiasta te hará sentir bien y suavizará tu rutina diaria. Además, te permitirá tener una mejor relación con las demás personas. Ponle entusiasmo y ganas a lo que estés haciendo.
Define tus objetivos. Así te sentirás más seguro y motivado cada día. Además, ponerle un norte a tus esfuerzos hará que te vuelvas más enfocado, eficaz y exitoso. Tener una meta, un sueño, y creer que es posible conseguirlo, hará que el universo conspire para que podamos alcanzarlos.
Acepta los retos. Recuerda que son una oportunidad para fortalecer tu capacidad de alcanzar el éxito. Si enfrentas los retos con valor, confianza y entusiasmo, te sentirás más satisfecho contigo mismo. Si fracasas aprenderás de la equivocación fortaleciendo tu experiencia.
JACKIE......
Es preciso renovar nuestra vida, llenarla de emociones y de proyectos nuevos. Hace falta que recuperemos la capacidad de soñar en grande, sin límites y sin anteponer los posibles obstáculos que tal vez enfrentaremos al trabajo que necesitamos hacer para conseguirlo. No podemos enfrentar una batalla sintiéndonos vencidos e incapaces antes de haberlo intentado siquiera.
Sentir pasión por lo que hacemos supone emprender un camino que nos conducirá a la realización como personas; por eso debemos procurar que ese algo especial que vamos a hacer sea afín con nuestra forma de ser, con nuestras aptitudes y con nuestros intereses personales.
La clave para que el trabajo se convierta en una actividad satisfactoria consiste, simplemente, en sentirnos a gusto con lo que hacemos, con los resultados que obtenemos, con nuestros compañeros y con el ambiente de trabajo, para poder poner toda nuestra energía, pasión y creatividad en cada cosa que hacemos.
El trabajo bien hecho, con mística, cariño, responsabilidad y compromiso, pone de manifiesto lo mejor de cada persona, pues el entusiasmo y la entrega que ponemos da como resultado la excelencia, y ésta nos da la posibilidad de triunfar en todos los demás aspectos de nuestra vida. Las personas exitosas y plenas consideran el trabajo como una fuente de realización.
Nuestra capacidad de vivir la vida a plenitud es innata, y es natural que tratemos de alcanzarla. Todo, absolutamente todo, puede convertirse en una actividad gratificante cuando se realiza con entusiasmo, pasión y el deseo de ser felices.
Para vivir con PASIÓN
Mantén una actitud positiva. Encuentra los aspectos positivos de tu trabajo, reflexiona acerca de su utilidad para los otros y sobre tu aporte al mundo. Piensa en cómo puedes mejorar tu desempeño para llegar a la excelencia y así entregar lo mejor de ti.
Trabaja con alegría. Una actitud entusiasta te hará sentir bien y suavizará tu rutina diaria. Además, te permitirá tener una mejor relación con las demás personas. Ponle entusiasmo y ganas a lo que estés haciendo.
Define tus objetivos. Así te sentirás más seguro y motivado cada día. Además, ponerle un norte a tus esfuerzos hará que te vuelvas más enfocado, eficaz y exitoso. Tener una meta, un sueño, y creer que es posible conseguirlo, hará que el universo conspire para que podamos alcanzarlos.
Acepta los retos. Recuerda que son una oportunidad para fortalecer tu capacidad de alcanzar el éxito. Si enfrentas los retos con valor, confianza y entusiasmo, te sentirás más satisfecho contigo mismo. Si fracasas aprenderás de la equivocación fortaleciendo tu experiencia.
JACKIE......
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