"Las personas felizmente casadas tienen una presión arterial menor que la de los casados infelices o los solteros, según un estudio de la Universidad Brigham Young.
Parece que el matrimonio conlleva algunos beneficios de salud exclusivos. Lo que beneficia la salud no es sólo estar casado, lo que más la protege es tener un matrimonio feliz", señaló en una declaración preparada la autora del estudio, Julianne Holt-Lunstad, psicóloga especialista en relaciones y salud. En el estudio participaron 204 adultos casados y 99 solteros que usaron monitores portátiles de presión arterial durante 24 horas. Los monitores registraron la presión arterial en intervalos aleatorios y suministraron un total de 72 lecturas.
"Deseábamos capturar la presión arterial de los participantes mientras hacían las cosas normales cotidianas. Obtener una o dos lecturas en una clínica no representa realmente las fluctuaciones que ocurren durante el día", apuntó Holt-Lunstad. En general, las personas felizmente casadas tenían cuatro puntos menos en las lecturas de la presión arterial que los adultos solteros. El estudio también encontró que la presión arterial entre la gente casada, sobre todo en los matrimonios felices, bajaba más durante el sueño que entre la gente soltera.
"La investigación ha demostrado que las personas cuya presión arterial permanece elevada durante la noche tienen un riesgo mucho mayor de problemas cardiovasculares que aquellas cuya presión arterial se reduce", dijo Holt-Lunstad.
El estudio aparece en la edición del 20 de marzo de la revista Annals of Behavioral Medicine. El estudio también encontró que los adultos que tienen matrimonios infelices tienen una presión arterial más alta que los felizmente casados y los solteros.
Holt-Lunstad anotó que los cónyuges pueden fomentar hábitos saludables el uno en el otro, como llevar una dieta saludable y hacerse revisiones médicas de manera regular. Las personas que tienen matrimonios felices también cuentan con una fuente de apoyo emocional, enfatizó.
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