Muchas recordarán las famosas muñecas Bebe Repollito (Cabbage Patch Kids) que fueron el furor en los años 80. Voy a ser honesta (aunque se me caiga la cédula), por allá por los ochenta y tantos, cuando se pusieron de moda los bebes repollitos, yo estaba como muy “crecidita” para eso de jugar con “la repollito”, pero… Como le tenía ganas a la muñequita!. Tanto así que en privado me apropié de la de mi hermanita.
Estas muñecas con cara de repollo, fueron creadas en 1983 por Xavier Roberts, el cual se inventó una historia un tanto extravagante sobre una “tierra del repollo mágico” y unos conejos que con unos cristales rociaban a los repollos de los cuales “salían” (por no decir nacían) los “bebes repollitos”.
La verdad su éxito se basó en que no habían dos iguales, tu bebé repollito era único como tú, y te pertenecía a ti, que eras su madre; pues venían acompañadas de sus papeles de adopción donde figuraba su nombre y fecha de nacimiento. En la práctica había una gran variedad de repollitos para elegir, la forma de la cara, el pelo, color de ojos o la ropa, habían bebes y otros ya mas grandecitas; algo cambiaba de un repollito a otro, pero la expresión de la cara era fantástica, todas parecían felices!, como si al mirarte te sonrieran, ¡Claro, como no iban a sonreír, si estaban mirando a su mamá!.
La parodia llevó al inventor de las Repollito a demandar a Topps, el fabricante de Garbage Pail Kids, por infracción de marca registrada. Las partes finalmente llegaron a un acuerdo en el que Topps accedía a rediseñar las cartas de modo que no se parecieran tanto a los bebes Repollito. Hoy en día se siguen vendiendo, siguen siendo diferentes unas de otras, vienen con sus pañales puestos, con su certificado de nacimiento, su nombre, su fecha de nacimiento, sus huellas de los dos piececitos, las huellas dactilares del artesano que la hizo y por supuesto su certificado de adopción!. Y como la tecnología también llega a la “tierra del repollo mágico” ahora tienen su web, en la que te das de alta como padre, te registras y puedes hasta cambiarle el nombre!
No hay comentarios:
Publicar un comentario